28 de desembre 2006

Cuaderno One - Page 1

Me cansé de estar en la cuerda floja. De ser el que está en la cuerda floja. De no pasar los controles da calidad de los que nunca se habían subido a la vida.

--
Me cansé de estar en la cuerda floja. De ser el que está en la cuerda floja. De no pasar los controles da calidad de los que nunca se habían subido a la vida.

--
Tous, sin comentario, Lladró lo mismo. El mal gusto es patrimonio de la humanidad.

--
La gente que no sabe comer en público, debería quedarse en casa. No voy a un restaurante a ver rodar comida por el suelo. Manchas en la ropa y manteles. Gente encorvándose ante los platos, como si adoraran a Mahoma. Chupando cuchillos. Esparciendo la comida por el plato. Bocas abiertas, colmadas, triturando comida y mostrando todos y cada uno de sus empastes.
--
Como con Luís Moya. Es increíble. Es igual que en la realidad, quiero decir, igual que en la tele.

--
Hay que ver de todo, la gente esta muy enferma.

--
Voy a intentar reproducirlo, pero no creo que pueda.

--
Durante un año, la realidad se pegó a la realidad, como un pedazo de celofán cargado de electricidad estática se pega a la mano y no hay forma de desprenderse de él. Realidad circular. Realidad pegada a un rodillo que repetía los acontecimientos. Realidad espiral de ciclos pequeños que arrastraba partes de la realidad vivida. Espiral esclavizante. Espiral jaula. Espiral descendiente. Vida fuera de control. Fuera de control y dentro de la repetición espiral de los hechos y lugares. Vida atrapada en la locura de la repetición de lo vivido. Locura asfixiante. Locura que desarma. Locura que te rinde. Te rinde al espiral y a la realidad pegada a la realidad. Condenado al espiral. Espiral estrecho. Tan estrecho que casi no cabe realidad en él. Caí en un sueño, fuerte y prolongado, durante días. Días que se convirtieron en semanas. La repetición de la realidad aumentó tanto su frecuencia que hizo imposible su existencia. No viví, solo dormí. Incapaz de entender lo que sucedía, me rendí. Rendido, me entregué a la no realidad. A los sueños. Viví en sueños durante días, durante semanas. Confeccioné una nueva realidad de sueños para poder sobrevivir. Consciente de la muerte de la realidad real, desperté para vivir mis sueños. No se si había realidad, pero de repente el espiral de mi nueva realidad se hizo tan grande que no podía verlo. No existía. La nueva realidad era libre. Se deslizaba por la vida como lo hace un pez en el agua. Tridimensionalmente. Consciente del arriba, abajo, derecha e izquierda, pero consciente también de la vulneración de dichos principios de orden. Experimentando todo, en todas las direcciones, para posteriormente adoptar solo aquello deseado.



Cover One